Durante el mes de enero, Javier Martínez Herce, orientador educativo en el Equipo de Atención Temprana de Logroño y antiguo compañero del EOEP Rioja Baja, nos ofreció al claustro CEIP Ángel Oliván de Calahorra, dos sesiones de formación dentro de su plan general de formación en centro para la intervención docente. El año pasado la ofrecía en el CEIP Aurelio Prudencio , también en Calahorra.
Desde un modelo de la educación HUMANISTA-ESTRATÉGICO, en su discurso nos transmitía de forma categórica la necesidad de UN CAMBIO DE MIRADA hacia lo que ocurre en nuestras aulas, hacia nuestro alumnado.
Y desde este punto de vista, sabiendo que el cambio está en nosotros mismos, Javier comenzaba señalando “los niños y niñas nos mandan señales que los adultos no sabemos interpretar”. Sabiendo leer estas señales, DANDO EN LA DIANA y acogiéndolas para darles respuesta desde el respeto, tenemos mucho solucionado. “Es curioso…, pero es así”
Hay muchos niños en nuestras aulas con malestar emocional que nos lo hacen llegar llamando nuestra atención o pasando totalmente desapercibidos. Tanto a unas señales u otras debemos estar atentos no centrándonos en lo que nos muestran, en los humos, sino en el fuego que está proporcionando eso humo y en las brasas que deja el fuego. Seguro que encontraremos autoestima baja, creencias de identidad negativa y bajas expectativas de éxito. Tanto la escuela como la familia somos responsables directos de no avivar ese fuego, ese malestar.
Partiendo de estas dos premisas, nos ofrecía herramientas de intervención docente:
Junto a estas herramientas tan potentes nos insistió en la importancia de hablar el mismo idioma todo el claustro, acercar nuestro vocabulario, nuestro lenguaje va a estructurar el pensamiento, y esto unido a la necesidad de gestionar nuestras propias emociones como adultos. Esto nos ayudará en nuestra tarea como docentes.
“Es curioso…. pero es así” nos decía en varias ocasiones dejando al claustro pensativo con infinidad de ejemplos de su experiencia como maestro y orientador, con un lenguaje indirecto que llegaba directamente a nuestros ventromediales.
Gracias Javier por compartir con nosotros esa forma que tú tienes de transmitir tan sencilla y tan profesional al mismo tiempo.